Existen muchos tipos de memoria, todos ellos claves para nuestro aprendizaje y para nuestra adaptación al medio. Te dejamos este enlace a nuestro post sobre qué es la memoria y cuáles son sus tipos, así podrás conocer todos. Pero, si quieres profundizar más en qué es la memoria sensorial, este post te interesará. ¡Comenzamos!
Qué es la memoria sensorial
Este tipo de memoria es el que nos permite guardar las impresiones de información que nos proporcionan los sentidos después de percibir un estímulo, aunque éste haya desaparecido. Es sin duda, uno de los tipos de memoria más extraordinarios, a la vez que efímeros, ya que el almacenamiento de esta información tiene una duración limitada.
Son, por ejemplo, los olores que percibimos cuando vamos caminando por la calle, los ruidos, sonidos o voces que reconocemos rápidamente, las texturas que percibimos al tocar objetos cotidianos o visualizar una escena que nos produce sensaciones de terror o miedo…Todos estos procesos perceptivos nos permiten adaptarnos y comprender nuestro entorno. Pudiendo reaccionar ante peligros, movernos con naturalidad y entender lo que nos rodea, en definitiva, disfrutar de todo nuestro mundo. Además, la memoria sensorial nos posibilita también, percibir señales mientras realizamos una actividad, por ejemplo, mientras conducimos podemos percibir las señales de circulación que debemos de seguir.
La memoria sensorial deja claro la estrecha relación que tienen los sistemas perceptivos y los procesos cognitivos. El aprendizaje y el buen funcionamiento cognitivo no sería posible sin la captación de información del mundo que nos rodea, que realizan los sistemas perceptivos. Por tanto, la percepción y la memoria tienen múltiples elementos comunes.
Tipos de memoria sensorial
Existen varios tipos y se pueden dividir de la siguiente forma:
Memoria icónica
La memoria icónica es la memoria sensorial visual, en otras palabras, es el resultado neurológico de la información ambiental que perciben nuestros ojos. Se encarga del registro de experiencias sensoriales visuales. Aunque es cierto que, los recuerdos icónicos son muy efímeros, ya que la información original solo está disponible durante menos de un segundo, lo que hace que sea aún más breve que la memoria ecoica.
Memoria ecoica
Es lo que se conoce como memoria auditiva y se encarga de retener toda la información que tiene que ver con los registros auditivos. Es decir, es el intermediario entre el estímulo auditivo y el recuerdo. Además, es capaz de almacenar gran cantidad de información auditiva en un periodo muy pequeño, concretamente retiene información hasta 4 segundos, por eso, es conocida como un tipo de memoria sensorial breve.
Memoria háptica
Se trata de la memoria táctil y se activa a través del contacto con los estímulos que impactan con nuestra piel. Con ella podemos tocar, levantar, mover y deslizar cualquier objeto al mismo tiempo. Además, nos permite examinar objetos mediante el tacto e interactuar con ellos.
Memoria olfativa y gustativa
La memoria olfativa nos da la posibilidad de registrar información sobre los olores que encontramos en distintos estímulos. Nuestro olfato es capaz de detectar una gran variedad de aromas, concretamente es el sentido que más variedad de estímulos detecta. Otra de las funciones que tiene, es que es capaz de enlazar estos olores con distintas situaciones y retener la información durante un tiempo prolongado.
Por otro lado, la memoria sensorial gustativa nos posibilita captar sabores para posteriormente poder clasificarlos en nuestra memoria. Esta memoria muchas veces se verá condicionada al grado de saciedad o la expectación que se tenga en el momento. Es cierto que, es una de las menos desarrolladas por el ser humano, pero en muchas ocasiones nos permite trasladarnos a momentos concretos que tenemos en nuestra memoria.
Ambas memorias tienden a crear fuertes vínculos emocionales y afectivos permitiendo mantenerlos en el tiempo de forma duradera.
Hay que tener en cuenta, que, aunque existan diferentes tipos de memoria sensorial, estos no trabajan de forma independiente, sino que, en muchas ocasiones dos o más sentidos registran información de un mismo acontecimiento de forma paralela. Aquí te dejamos un enlace para que conozcas qué es la memoria de trabajo, también muy importante en nuestro día a día.
Beneficios de estimular la memoria sensorial
Para estimular esta capacidad cognitiva desde GRADIOR queremos concienciar de la importancia que tiene la estimulación cognitiva, por eso te dejamos este post donde te explicamos más detalladamente qué es la estimulación cognitiva.
Como ya hemos explicado, la memoria es un conjunto de sistemas de retención, en este caso concreto, la memoria sensorial se encarga de retener estímulos, para almacenarlos durante un periodo de tiempo concreto. Te dejamos este enlace sobre la memoria y GRADIOR, donde podrás encontrar los mejores ejercicios de estimulación cognitiva para trabajarla.
Pero, en todos los procesos de la memoria, existen otros factores que influyen en ella, como es la atención y la percepción, por eso es muy importante trabajar todas por igual. Para estimular de forma correcta la atención en GRADIOR dispondrás de múltiples ejercicios, que se pueden adaptar a las necesidades de cada paciente.
Si te ha parecido interesante y quieres conocer nuestra herramienta terapéutica GRADIOR, te dejamos nuestro correo electrónico, info@gradior.es, donde podrá consultarnos sin compromiso.