En anteriores posts te hemos contado en qué consiste la Parálisis cerebral y los tipos que existen. Hoy queremos profundizar un poco más sobre esta enfermedad mental que actualmente afecta a una de cada 500 personas en España, lo que se traduce en 120.000 personas con parálisis cerebral.
La parálisis cerebral se produce por un desarrollo anómalo de las capacidades cognitivas o por una lesión del mismo. Dicho daño puede darse tanto en el embarazo, en el nacimiento o en los primeros años de vida de una persona.
Normalmente suele estar presente en el nacimiento porque el cerebro del bebé no se desarrolla correctamente en el útero. Sin embargo, en algunos casos puede asociarse a la exposición de la madre a ciertas sustancias o comportamientos nocivos para la salud.
Las infecciones cerebrales como meningitis, encefalitis o ictericia son las más comunes. También lesiones neurológicas como las provocadas por un accidente de tráfico, por ejemplo.
– La meningitis, causa inflamación de las membranas que rodean el cerebro y la médula espinal.
– La encefalitis viral también provoca la inflamación del cerebro. Aquí te dejamos un post donde te explicamos en qué consiste la encefalitis.
–La ictericia severa no tiene tratamiento en los recién nacidos y suele desencadenar la aparición de la parálisis cerebral.
Síntomas de padecer Parálisis Cerebral
Suele aparecer durante las primeras etapas vitales, como son la lactancia o la primera infancia, cuando el cerebro va desarrollándose. Algunos de los síntomas son:
– Movimientos descontrolados.
– Falta de coordinación.
– Músculos rígidos o con flacidez.
– Dificultades para caminar, escribir, hablar, tragar o comer.
– Convulsiones.
– Babeo excesivo.
Diagnóstico
Normalmente se diagnostica en los primeros dos años de vida de una persona. No obstante, los síntomas más leves pueden pasar desapercibidos y no ser diagnosticados hasta los cuatro o cinco años de edad, tras una observación y control del desarrollo tanto físico como cognitivo del niño. En caso de encontrar alguna anomalía, el médico puede solicitar pruebas específicas como resonancias magnéticas para determinar si existe algún daño cerebral.
Prevención
Al tratarse de complicaciones que suelen darse durante el embarazo o el parto en algunos casos no pueden prevenirse, aunque la mejor forma de tomar precauciones son reducir los factores de riesgo. Para ello se puede hacer lo siguiente:
–Tomar ácido fólico, para prevenir el parto prematuro, que está asociado a esta enfermedad mental y asegurar un embarazo normal.
– Realizar ejercicio físico durante el embarazo, lo que incluye realizar una dieta saludable y descansar lo suficiente.
– Evitar hábitos poco saludables como beber alcohol, fumar o consumir otro tipo de sustancias nocivas para la salud.
– Evitar exponer al bebé a situaciones que pueden terminar en lesiones o accidentes.
Tratamiento de la Parálisis Cerebral
Lamentablemente no existe una cura definitiva para esta enfermedad mental. Las soluciones más efectivas son desarrollar un tratamiento con el que mejorar las habilidades y funciones cognitivas de paciente.
El plan de tratamiento puede incluir las siguientes opciones:
- Terapia del lenguaje: para aprender a utilizar alguna modalidad de lenguaje como el de señas. Además de aprender a comer o tragar. Aquí te dejamos un post en el que te mostramos cómo trabajar el lenguaje con nuestra herramienta de apoyo terapéutico Gradior cognitivo.
- Terapia ocupacional: como método de aprendizaje de autocuidado y en tareas motoras como la escritura.
- Fisioterapia: mejora la flexibilidad, la coordinación, el equilibrio y la fuerza. El uso de dispositivos de asistencia como muletas, férulas o sillas de rueda puede contribuir a mejorar la independencia y calidad de vida.
- Cirugía: como una opción para aliviar la rigidez de músculos o tendones.
- Medicamentos: como calmantes o anticonvulsivos siempre bajo supervisión médica.
¡Desde Gradior apostamos por la mejora de la calidad de vida y el bienestar de las personas!